Los últimos estudios sobre el uso de la red en la escuela ofrecen datos pocos esperanzadores respecto a la apropiación de la tecnología. Los estudiantes se alfabetizan
digitalmente en casa de forma mucho más masiva e importante que en la escuela. Y, lo que es más grave, esta formación no es integrada ni utilizada por la escuela. La escuela integra, en el mejor de los casos, la tecnología para hacer lo mismo que hacia: buscar información, realizar ejercicios repetitivos, etc.
Sólo puede educarse en la red para formar parte de la red, sólo puede integrarse la tecnología si cambiamos las metodologías de aprendizaje y, por supuesto, se revisan muchos de los contenidos del currículo.
Uno de los aspectos que deberíamos atacar con mayor urgencia es colocar los ordenadores en las aulas y no más crear aulas de ordenadores.